Hace unos días publico Ana de http://universodecometas.blogspot.com.es/, una frase
donde decía que nos debe dar igual el color y raza de las personas y si es homosexual
o gordo o flaco, en fin algo así. Al leerlo me vino a la mente un recuerdo de
mi infancia.
“Un grupo de niñas puestas en círculo alrededor de la
maestra de religión, están dando las lecciones para tomar la primera comunión.
Son unas siete, la maestra les explica esto o aquello y de pronto la maestra
dice: -porque Dios, Jesús quiere mucho a
las niñas de piel blanca, es que las niñas de piel oscura no son buenas y por
eso Jesús las aparta- La niña, la única niña del grupo de piel oscura, bien
supo al instante que la maestra se refería a ella”
Como creéis que se sintió esa niña? Por suerte los
profesores sí que han evolucionado en ese sentido de la integración. Pero a las
personas nos cuesta cambiar los patrones, si hace cincuenta años estaba
perseguido ser gay, ¿por qué ahora está bien visto? Siguen con el mismo chip. Y así en todo, nos cuesta
aceptar patrones nuevos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Doy las gracias a todos los que pasaís por este espacio y especialmente a los que dejaís un comentario. Para mí es muy gratificante ver vuestras visitas y comentarios. Merci beaucoup. (Muchas gracias)