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martes, 31 de enero de 2017
lunes, 30 de enero de 2017
POCO, POQUITO...
Poco, poco he bajado esta semana. Todas las semanas me sorprendo, unas para muy bien y otras para regular, en fin aquí estamos paso a paso.
viernes, 27 de enero de 2017
ISABEL DE BAVIERA
Isabel de Baviera se casó a los catorce años en 1385 con
Carlos VI, sus padres la hicieron ir a Amiens con el pretexto de visitar las
reliquias de San Juan Bautista que se guardaban en dicha ciudad y para
cumplimentar algunos votos realizados, pero verdaderamente la razón fue que
visitara a Carlos, y procurar impresionarlo, cosa que sucede, pues habiendo
sido vestida a la francesa y aconsejada por la condesa de Hainaut, le resulta
tan bella que quería sin más espera, casarse con ella dos días después.
Está representada en este grabado con la vestimenta que
llevaba el día de su boda.
jueves, 26 de enero de 2017
OTRO RECUERDO
Hoy He vuelto a tener un recuerdo de mi infancia.
Una niña de unos diez años va al colegio, a lo lejos ve a su señorita que va por
delante de ella. La niña corre para darle alcance. Llega a su altura pero se
queda dos pasos por detrás. La niña es muy tímida y con la pequeña carrera y su
timidez, su menudo corazón late de tal manera que parece se le vaya a salir del
pecho. Continuó por detrás de su señorita, sin atreverse a hablarle, esperando
que la señorita se diese cuenta que estaba allí y fuese ella quien hablase. No
fue así, llegaron al colegio andando una en pos de la otra.
La niña al llegar al
colegio lo primero que hace es entregar los deberes, si no lo hace así, cuando
venga su compañera de pupitre y las dos chicas del pupitre de delante, la
obligan a que les deje el cuaderno para copiar los ejercicios y la niña no quiere
que eso ocurra porque la señorita
empezaba apremiarla para que entregara el cuaderno, y la niña lo pasa muy mal.
Por la tarde la niña,
sale del colegio a las cinco y se va directamente a casa. A casa de sus padres
pero que en esos días no están. Su padre trabaja en el campo y su madre se ha
tenido que ir con él ayudarle. La niña duerme
y come en casa de su tía. Se va a su casa a hacer los deberes porque encasa de
su tía no hay un sitio donde hacerlos y además sus primas que son adolescentes
le gastan bromas y no le dejan concentrarse. Por todo ello se va a su casa,
donde al no estar sus padres tampoco hay estufa ni ningún punto de calor, la
niña hace los deberes en el tablero de una máquina de coser que está delante de
la ventana, cuando termina de hacerlos apenas entra luz por la ventana. Los pies no los puede mover, entumecidos por
el frio, corre el mes de diciembre del mil novecientos sesenta y cuatro.miércoles, 25 de enero de 2017
martes, 24 de enero de 2017
lunes, 23 de enero de 2017
¡TODA CONTENTA!
Toda contenta estoy con este descenso en gramos. No sé si
fiarme de la báscula, porque me parecen muchos gramos, y es que el otro día a
mediados de semana, me decía que había cogido medio kilo y hoy me dice que he
perdido cuatrocientos gramos, con referencia a la otra semana. Quizás fue por
pesarme entre semana que nunca lo hago, diría la báscula -veras que susto le
doy a esta- y vaya que me lo dio, pero hoy me ha recompensado.
viernes, 20 de enero de 2017
CONSEJOS
Maestro, ¿hasta qué punto debo tomar en cuenta los consejos y la opinión de los demás? Hijo, los consejos siempre debes considerarlos, aunque sea para desecharlos, porque son la expresión de la experiencia ajena. En cuanto a las opiniones, nunca las consideres porque sólo expresan los intereses del que los da. A todo lo que venga de otro, declaraciones, opiniones, consejos, primero pásalos por el filtro de la razón y luego lo meditas y en seguida, puedes usarlos o no.
jueves, 19 de enero de 2017
Edith Piaf - Non, Je ne regrette rien
Edith Piaf
(Edith Giovanna Gassion; París, 1915 - Provenza, 1963)
Cantante y letrista francesa. Su vida estuvo marcada por la desdicha desde su
más tierna infancia, lo que ejerció una influencia decisiva sobre su estilo
interpretativo, lírico y desgarrado al mismo tiempo. Su aspecto desvalido le
valió el nombre por el que es universalmente conocida: Piaf («gorrión»).
Hija de un contorsionista acróbata y de una cantante de
cabaret, su infancia fue triste. Sus padres se separaron muy pronto; la madre,
alcoholizada y enferma, dejó la custodia de Edith a su marido (también
alcohólico) y a una abuela paterna. Dada la precaria situación económica de la
familia, Edith tenía que ganarse unas monedas cantando en calles y cafés de
París.
La situación empeoró cuando Edith, con 16 años, se quedó
embarazada. En 1932 tuvo una hija a la que llamó Marcelle, pero murió a los dos
años. La vida de la cantante quedó marcada por esta tragedia. Siguió cantando
en cafés y clubes de la calle Pigalle, en el mundo que rodeaba a los barrios
menos recomendables del París de la época.
Su vida cambió cuando, cantando en la calle, un transeúnte
muy elegante se paró a escucharla. Ese hombre resultó ser Louis Leplée,
propietario del cabaret Gerny's, uno de los más conocidos de París. Tras una
pequeña prueba, Edith fue contratada de inmediato. Su éxito no tardó en llegar
y fue conocida como "Môme Piaf" ("pequeño gorrión"). El
propio Leplée instruyó a Edith para convertirla en una gran figura del cabaret.
Era 1937, y había nacido una nueva estrella: Edith Piaf.
Sin embargo, la vida volvió a castigar a la joven Piaf, ya
que Leplée fue encontrado muerto de un disparo en el club que regentaba; la
cantante fue sospechosa del asesinato. La prensa la acusó y la sociedad
elitista parisina le volvió la espalda. Volvió a mezclarse con lo peor de los
barrios bajos de París, cantando en tugurios y llevando una vida desordenada.
Su consagración llegó tras la Segunda Guerra Mundial, cuando
se convirtió en la musa de poetas e intelectuales del París existencialista y
se ganó la admiración incondicional del público. Un letrista conocido como
Raymond Asso, que era su amante, la ayudó a sobreponerse. Edith Piaf remontó el
vuelo y volvió a los grandes escenarios de Francia, de Europa y de América. Se
hizo amiga de la actriz Marlene Dietrich y se convirtió en la gran dama de la
canción francesa, ayudando a talentos emergentes como Charles Aznavour, Georges
Moustaki, Yves Montand o Gilbert Bécaud, y relacionándose con intelectuales
como Jean Cocteau.
En 1946 viajó a Nueva York y conoció al amor de su vida, el
boxeador Marcel Cerdan, quien murió en 1949 al estrellarse el avión en que
viajaba. Esto hundió nuevamente a Edith en una profunda depresión, que superó a
base de alcohol y tranquilizantes. Fue a la vez la época de sus grandes éxitos:
La vie en rose o Les trois cloches.
En 1950 colaboró con Charles Aznavour en canciones como
Jezébel; fue el año además en que triunfó en el Olympia, mientras que en 1956
lo haría en el Carnegie Hall de Nueva York. Tras un accidente, Edith quedó
maltrecha y se hizo adicta a la morfina. Una larga lista de enfermedades le fue
diagnosticada, y en 1959 se le descubrió un cáncer.
Sus últimos años vivió alejada de los escenarios junto a su
nuevo marido, el griego Theo Lambukas. En junio de 1961 fue premiada por la
Academia Charles Cros por toda su carrera artística. Murió en Provenza el 11 de
octubre de 1963. En su entierro, el cortejo fúnebre fue seguido por una
multitud de 40.000 personas.
Entre las muchas canciones que popularizó cabe destacar Mon
légionnaire, Je ne regrette rien, La vie en rose, Les amants de Paris, Hymne a
l’amour, Mon dieu y Milord. También actuó en películas (French-can can, Étoile
sans lumière, Paris, chante toujours) y tuvo otros romances con cantantes del
relieve de Charles Aznavour, Georges Moustaki o Yves Montand. En los últimos
años de su vida escribió una autobiografía con el título de Au bal du chance.
miércoles, 18 de enero de 2017
martes, 17 de enero de 2017
UN RECUERDO
Hace unos días publico Ana de http://universodecometas.blogspot.com.es/, una frase
donde decía que nos debe dar igual el color y raza de las personas y si es homosexual
o gordo o flaco, en fin algo así. Al leerlo me vino a la mente un recuerdo de
mi infancia.
“Un grupo de niñas puestas en círculo alrededor de la
maestra de religión, están dando las lecciones para tomar la primera comunión.
Son unas siete, la maestra les explica esto o aquello y de pronto la maestra
dice: -porque Dios, Jesús quiere mucho a
las niñas de piel blanca, es que las niñas de piel oscura no son buenas y por
eso Jesús las aparta- La niña, la única niña del grupo de piel oscura, bien
supo al instante que la maestra se refería a ella”
Como creéis que se sintió esa niña? Por suerte los
profesores sí que han evolucionado en ese sentido de la integración. Pero a las
personas nos cuesta cambiar los patrones, si hace cincuenta años estaba
perseguido ser gay, ¿por qué ahora está bien visto? Siguen con el mismo chip. Y así en todo, nos cuesta
aceptar patrones nuevos.
lunes, 16 de enero de 2017
¡ESTO MEJORA!
Esto ya es otra cosa, pero la verdad es que la semana pasada
me sorprendí al ver el aumento y ésta me he sorprendido al haber bajado
quinientos gramos. Ni comí de más esa semana ni ahora he comido de menos, estoy
en la misma línea de alimentación. Pienso que quizás esa semana es que retuve líquido.
Lo importante es seguir en descenso de gramos, que hagan kilos.
viernes, 13 de enero de 2017
INÈS DE LA FRESSANGE
Inès de la Fressange. Si una mujer encarna el arquetipo de
la parisina ‘chic’, no cabe duda que es ella.
Inès Marie Laetitia Églantine Isabelle de Seignard de la Fressange nació
en Saint-Tropez; es hija de madre argentina (la modelo Cecilia ‘Lita’ Sánchez
Cirez), nieta de la colombiana Cecilia Dávila Ordóñez, y por sus venas corre
también sangre checoslovaca y polaca. Sin embargo, cuando en 2009 el diario
francés Le Figaro llevó a cabo un sondeo de opinión para determinar quién
representaba a la parisina por excelencia, fue ella la que obtuvo la gran
mayoría de los votos, superando a celebridades como Chiara Mastroianni (hija de
la parisinísima Catherine Deneuve), Charlotte Gainsbourg o la primera dama
Carla Bruni-Sarkozy.
Fue quizás el obtener éste que ella considera un honor
(“¡Eran todas más jóvenes que yo!”) lo que la motivó a poner sus secretos por
escrito, y también una manera de responder de una vez por todas a la eterna
pregunta sobre en qué consiste el estilo de la parisina y cómo lograr el look
Inès de la Fressange, dónde vestirse o qué crema de noche usar. Resultado: una
guía parecida a un álbum de recortes, que Inès elaboró con la ayuda de la
periodista Sophie Gachet y en la que cuenta a las lectoras sus astucias sobre
moda, decoración y ‘way of life’, con todos sus lugares favoritos y sus
consejos, administrados con el humor que le es tan característico.
A quienes señalan la evidente frivolidad de su opus, Inès
responde: “Por supuesto que no es un gran ensayo de filosofía sobre el
feminismo (…) es un poquito frívolo, todos necesitamos un poco de
ligereza”. Pero, al mismo tiempo,
explica que “la apariencia concierne a todo el mundo. La moda no es algo
necesariamente superficial. Finalmente ¿cuál es la empresa francesa que exporta
más en Asia? No es el TGV, no es Airbus. Es LVMH, que como bien se sabe vende principalmente moda. No hay que sentir
desdén por la apariencia. En una entrevista para un empleo, lo primero que ve
el potencial empleador es su aspecto exterior. Es hipócrita decir que no tiene
importancia, cuando hay muchos códigos -como los zapatos, el peinado o el
reloj- por los que juzgamos a la gente.
Todos esos detalles son muy reveladores”.
Dicho esto, nos podemos lanzar sin complejos a las páginas
de La Parisienne para saber cuáles son los 10 mandamientos para tener un look
desparejado (no hay nada peor que conjuntarse de pies a cabeza), cómo hacerse
de un estilo, los básicos infaltables, cómo elegir zapatos o bolsos, cómo usar
joyas y bisutería (mezclar auténtico con falso, viejo con nuevo), cómo mejorar
su aspecto en ‘5 minutos crono’ y el código vestimentario para cada ocasión
(Inès, gran viajera, propone la lista de lo que no hay que olvidar para un
vuelo transatlántico) al tiempo que advierte de los peligros de seguir las
tendencias ‘con los ojos cerrados’.
Según Inès, las italianas siguen mucho la moda, las
americanas cuidan especialmente su pelo y compran mucho y las sudamericanas son
muy elegantes. En cuanto a las parisinas dice:”
Durante mucho tiempo pensé que eran como todas las mujeres
del mundo, y en realidad no: creo que somos muy particulares. Guardamos la ropa
de una estación a otra, mezclando una prenda comprada en supermercado con
alguna de una gran marca. No intentamos seguir la tendencia a cualquier precio.
Estamos al corriente de lo que se usa, pero no somos fashion victims. Puede
llevar zapatos de este año, pantalones del año pasado, un top que seguirá
usando el año que viene, una joya vieja con look moderno. Todo esto nos parece
completamente obvio”. Es esta mezcla sutil, tanto en la forma de vestir como de
vivir en general, la que Inès intenta explicar en La Parisienne, descifrando
los códigos que hacen de la parisina… una parisina.
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